[contra]panorama. Prólogo

Esto que estamos llamando un prólogo podría ser un epílogo, o una coletilla. No empezamos de cero, ni siquiera empezamos, más bien regresamos. Hay algo de optimismo desesperado en los repetidos intentos de las trienales o bienales por definir el presente y plantar su bandera en el futuro. Siempre llegan, de alguna forma, tarde a la cita. La temporalidad acelerada con la que el sistema del arte adopta y da por agotados sus temas de interés, no hace sino incrementar esta sensación de que todo se vuelve rápidamente viejuno. Ahora que el futuro ha dejado de ser el repositorio de todas las promesas incumplidas de la modernidad para convertirse en fuente de ansiedades planetarias, ¿qué sentido tiene seguir organizando bienales?  ¿Qué legitimidad le queda al museo como institución que organiza y hace legible lo moderno?

Este prólogo reúne dos intervenciones que lidian con estas preguntas mejor de lo que nosotres podemos hacerlo. En el caso de El Reino (2003) de Dora García, se trata de una obra perteneciente a la Colección MACBA; en el caso de la obra de Antonio Gagliano y Verónica Lahitte,Reconstrucción: Barcelona Art Report [2001], se trata de un encargo realizado específicamente para esta ocasión.